10/8/2016 7:00 am - Actualizado 10/8/2016 12:00 pmMariana LenharoDo G1, en São PauloEl día a día de la UCI del Instituto de Infectologia Emílio Ribas, en São Paulo, cambió después de que el fisioterapeuta Luís Antônio Nunes implementara su invento: un dispositivo hecho a mano con tubos de PVC que ayuda a los pacientes encamados a sentarse en el borde de la cama, una medida imprescindible para evitar complicaciones derivadas de permanecer largos periodos en la misma posición.La "silla" desarrollada por Nunes apoya a los pacientes que no pueden permanecer sentados.Sin el equipo, los pacientes deben ser sacados de la cama y sentados en un sillón, lo que implica más riesgos.Alternativamente, se necesitan dos profesionales: uno para sostener el torso del paciente y otro para ayudarlo a realizar la rutina de fisioterapia."El paciente necesita apoyo lateral y de espalda. O la enfermera lo sujetaba un rato o le ponía cobijas y almohadas en la espalda para sostenerlo, pero terminaba resbalando", dice Nunes.La invención consiste en una estructura de PVC que se asemeja a una silla, pero sin la parte del asiento.Se coloca sobre la cama para que el paciente gane apoyo para permanecer sentado.Esto permite que un solo profesional pueda sentar al paciente al lado de la cama y ayudarlo a realizar los ejercicios recomendados para cada situación.Primero, Nunes intentó hacer el aparato con madera y espuma, pero la estructura era demasiado pesada y el prototipo no funcionó.Tuvo la idea de utilizar PVC cuando miraba videos en internet que enseñaban a hacer objetos con este tipo de material.“Fue prueba y error. Medí cuál sería el largo para acomodar el brazo del paciente adulto, el largo del torso, cómo daría estabilidad hacia atrás y hacia los lados, y mejoré”, dice.El material para construir el aparato cuesta alrededor de R$ 70.'Marcó la diferencia' La fisioterapeuta Graziela Ultramari de Lima Domingues, jefa de la sesión de rehabilitación de Emilio Ribas, observa que la silla fue una solución barata y creativa para hacer frente a una limitación de servicio.“Hay sillas de este tipo para comprar que son más sofisticadas, mecanizadas, pero sabemos que en el sector público no tenemos esa disponibilidad”, dice el profesional. “Este es un aparato barato, fácil de armar y fue homologado. por la comisión interna de control de infecciones del hospital, ya que puede pasar por un proceso de desinfección entre un paciente y otro”.Graziela explica que el solo hecho de que el paciente esté postrado en cama ya representa un riesgo para la salud.“El paciente encamado empieza a perder funcionalidad, fuerza muscular, adquiere adicciones posturales. Por eso es tan importante hacer fisioterapia tanto en la parte respiratoria como en la motora, y en eso ayuda la silla”, dice.Para ella, Nunes fue más allá de su papel.“Esta visión que tenía, de preocupación por el bienestar de los pacientes, marcó la diferencia en nuestro servicio para los pacientes de la UCI”.Otros servicios han adoptado Ahora, según Nunes, la idea se está extendiendo y ha recibido solicitudes de colegas en otros estados para obtener instrucciones sobre cómo armar la silla."No tiene patente, es de dominio público y mi placer será ver la reproducción de este sencillo invento en Brasil".La silla fabricada con esos moldes ya se está utilizando en instituciones de Acre, Paraíba, Piauí y Mato Grosso.